Las paredes de piedra, los callejones, una puerta recién pintada... Cualquier escenario puede convertirse en un fondo ideal para un retrato infantil. Es importante que no haya sol directo para que la luz suave inunde el rostro y tener paciencia hasta que el niño mire a la cámara mientras juega y explora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario